Hoy en día ya no nos enseñan a ahorrar con la tradicional hucha de cerdito, sino que se abren productos de ahorro desde que nacen los hijos/as en entidades bancarias o aseguradoras.
Y, a la vista de cómo están las cosas es bastante normal. Hay una tendencia general para restringir el uso del efectivo, motivado en la lucha y prevención del blanqueo de capitales. Pero igual se está llevando a unos extremos un poco exagerados
Siguiendo con el principio del post, si abres una hucha que has estado ahorrando con monedas de 1 o 2 euros (o de otro importe) durante un tiempo, comprobarás que si lo quieres ingresar en ¡tu cuenta bancaria! te van a poner problemas (tienes que llevar todas las monedas en blísters ya preparados, a unas determinadas horas de unos determinados días) y, sobre todo, te van a cobrar por el ingreso (en algunas entidades bancarias cobran por el nº de monedas, sin importar la cifra final que se ingrese).
De acuerdo con la normativa comunitaria las entidades bancarias no tienen obligación de aceptar más de 50 monedas en un mismo ingreso (pero no te informarán de esto), salvo que se ingrese el dinero en un ente público. Y esto es lo que les permite cobrar por este servicio.
Incluso hay un conocido centro comercial que ha puesto una máquina que recoge las monedas que tenemos sobrantes y te lo canjea por un vale que o bien puedes comprar en el propio establecimiento o canjerar por dinero efectivo. Este vale tiene una duración de 1 día y el servicio tiene una comisión cercana al 10%
Debes recordar que el pago en efectivo está limitado a 2.500 euros por operación, sin que se puedan fraccionar en varias facturas la misma operación para evitar esta prohibición. Para importes superiores tienes que usar transferencias o cheques como medios de pago.
Si ingresas más de 3.000 euros en una cuenta corriente, la entidad bancaria está obligada a identificarte.
Fotos: Skitterphoto, kschneider2991 y Alexas_Fotos